Capítulo 1
“Mi amor, enserio. Qué vamos hacer?”
"No tenemos otra alternativa que... esa!”
Y trayendo el rostro de su amado para más cerca ella sugiere “Hasme el amor”
Los dos en un mundo completamente distinto se esconden debajo del cobertor y en pocos minutos una palabra haz que ellos se despierten para la realidad y sean obligados a separarse físicamente. “CORTA” y todavía asustados con lo que pasó, Gaby y Bernie se preparan para tomar la próxima escena.
Alrededor de 1h se acaba las grabaciones externas de aquel día, todavía era tarde y el equipo tenía que volver a la ciudad para prepararse para grabación del día siguiente. Los únicos actores presentes fueron llevados en un vehículo separado del resto del equipo, debido a que el cuerpo técnico todavía lo harían algunas películas de los hermosos paisajes que tuvo en cuenta el capítulo 118.
Gaby y Bernie fueron para el coche sin decir nada, solamente miradas y sonrisas tímidas. Las escenas de hoy no parecían fuertes, pero las afecto a Gaby.
Berinie – “Me alegro que terminamos de gravar temprano”
Gaby – “Es verdad.”
Bernie se puso raro por la respuesta fría y corta Gaby. Se sentía triste por un momento, y con el temor de perder a la mujer que amaba, se armó de valor y le preguntó.
Bernie – “Qué pasó? Hice algo malo? Estás bien?”
Gaby – “Perdón, Bernie. Es que...” Ella no sabía lo que estaba sintiendo, tampoco lo que estaba pasando. "No es nada. Sólo estoy cansada. Me desperté muy temprano para venir y me quedé estudiando el texto a última hora de la noche. Es solo cansancio".
Bernie – “No te preocupes. El viaje de regreso es largo. Puedes dormir, no voy a molestarte”.
Bernie pasó la mano en el cabello de Gaby y la trajo más cerca, haciendo Gaby acostarse en su pecho para que pudiera dormir. Luego se quedó allí y se abrazó a la cintura para que pudiera estar más cómodo el sueño.
Además del cansancio enorme, Gaby no logra parar de pensar en las escenas grabadas. Por primera vez en la novela, ella se sintió como Gabriela y no como Emperatriz. Hablar de los problemas y de las luchas en contra de las personas que hacen mal, la hizo recordar de su propia vida y en este momento Gaby tuvo la respuesta que necesitaba oír. “Por esto estoy aquí. Para ayudarte y juntos sigamos adelante”... y lamentando el hecho de que la respuesta era justo lo que se esperaba en el guión, Gaby se quedó dormida.
Mientras tanto Bernie también se mantuvo pensando. Él sabía lo que sentía, pero no quería asustar a Gaby con una declaración, además Gaby siempre fue muy profesional. “A final de cuentas, porque Gaby continuó? Será que ella siente lo mismo que yo? O fue cosa de momento?”
Abrazados, los dos siguieron el viaje a la casa de Gaby. Y pasando la mano suavemente en la cara de Gaby, Bernie la despertó para avisarla que ya habían llegado. Al despertar, con movimientos suaves y aún con mucho sueño, Gaby alzó la vista y, mirando a los ojos de Bernie, quedó por unos momentos, extáticos. Cuando llegó a la valentía de decir algo acerca de lo que estaba sintiendo, los dos fueron sorprendidos por Gabo, llamando a la puerta del coche.
Los dos saltaron del coche, Gaby abrazó y besó a su hijo y él fue corriendo para la casa. Y luego, cara a cara con Bernie, Gaby sólo dijo "Buenas noches." Bernie abrió su sonrisa y acercándose a Gaby le dio un suave beso en la mejilla y haciendo temblar Gaby, le susurró al oído... "Buenas noches. Y que duermas bien".